Artesanías de Barro "RaMa" | Santiago Coachochitlán
En la comunidad de Santiago Coachochitlán, municipio de Temascalcingo, encontramos un taller muy diferente a los demás, este sitio alfarero no vende el barro pintado, lo vende al natural. Agradezco las atenciones de Gustavo Ramírez y el Sr. Alfonso Ramírez (trabajadores y familia) por las atenciones que me dieron para conocer más a fondo esta hermosa tradición artesanal y su problemática. El día en este taller comienza temprano, lo primero que se hace es ir por la materia prima, el barro, pero esta tierra no es cualquier tierra, existen 3 tipos de Barro, el blanco, rojo y negro, cada uno con una elasticidad, endurecimiento y una resistencia diferente. El barro debe de crear una pieza maciza. Una vez que se extrae el barro del banco cercano se procede a ser secado, se tiende en un espacio donde el sol haga el trabajo; cuando se ha secado se comienza a moler para obtener una consistencia fina y sin grumos. Este proceso se realiza al aire libre, por lo cuál el calor es un factor de fatiga para las personas que realizan esta tarea. Una vez que se ha cernido en una criba se comienza a hacer la "mezcla", y se da inicio al proceso de amasado, el cuál requiere mucha destreza y de fuerza física, ya que el no realizarlo con cuidado puede afectar la calidad de la pieza en donde se utilice este bello material.
Una vez que se obtiene la consistencia adecuada se lleva a una de las mesas de trabajo donde es moldeado para que sea introducido al molde, y ahí se le dan los detalles para que el diseño se vea lo mejor posible. Los moldes que usan van desde la olla con orejas tradicional, la copa, la tipo piedra, la de flores, la italiana y algunas otras donde el diseño se realiza de forma manual. El Sr. Alfonso y su familia han logrado avanzar de una técnica básica hasta una especializada, sin dejar de lado lo tradicional y artesanal; innovando y además participando con sus creaciones en competencias artesanales para así poder dar a conocer en más lugares estas bellas piezas tradicionales. Después de que se deja secar el barro un momento en el molde y este adquiere la consistencia deseada se realiza el alisado de la pieza para eliminar imperfecciones y que la forma sea la adecuada. Una vez que se ha limpiado se procede a sacar la pieza para que seque al sol y pueda estar lista para ser introducida al horno.
A pesar de que su horno es eficiente y tratan de contaminar lo menos posible el medio ambiente al usar madera (legal, de aserradero registrado y avalado por la PROFEPA) y no llantas, basura u madera ilegal cortada de zonas restringidas como en otros hornos de la región, ellos estan consientes de que el humo negro que se desprende no solo afecta ya a muchas personas de la comunidad, si no también a la tierra de la cuál logran hacer estas increíbles piezas: Gustavo comenta que la mina de barro esta muy contaminada y hay mucho riesgo de que estas cenizas de llanta y basura que caen directamente afecte la calidad del barro y además mancha las piezas. El Sr. Alfonso comentaba que en este momento se encuentran a la espera de que un proyecto de horno a base de gas y con quemadores de vela sea lo adecuado para poder olvidarse de una vez por todas de esta contaminación. Además de que también espera que los demás artesanos de la comunidad comiencen a preocuparse por mejorar las condiciones y la eficiencia de su horno para así evitar a toda costa el desgaste de la ecología de la región. El proceso de horneado dura aproximadamente 3 horas: hora y media para
calentar, hora y media para cocer, y además hay que agregar a esto el tiempo que tarda en adquirir una temperatura manejable la pieza para poder sacarla del horno.
A pesar de que algunos de los procesos se llegaran a industrializar, las manos del artesano son necesarias en todas las partes de este proceso, nos comentan que la razón de esto es para poder ser más competitivos con con otras industrias. La calidad de las piezas es un factor que muchos no valoran, en este taller las cosas no se hacen al aventón como podemos comprobar al observar el producto terminado. Los precios son otro de sus problemas, ya que ellos si manejan costos y márgenes de error, y muchos artesanos abaratan el precio de lo que hacen, entregando muchas veces piezas que no tienen la misma calidad, y perdiendo además dinero en el proceso, por eso para ellos es muy importante evitar el regateo, ya que muchas veces la ganancia es mínima, esto debido a algunos factores, el más significativo es que muchas veces las piezas se rompen durante el proceso, ya sea por estar mal acomodadas o por que el barro no tenía la calidad deseada y era muy frágil. Te invitamos a rescatar esta bella artesanía y que compres directo con los artesanos esto para poder evitar la reventa y así nuestras bellezas alfareras puedan ocupar un lugar importante en la vida de los Temascalcingences.
En la comunidad de Santiago Coachochitlán, municipio de Temascalcingo, encontramos un taller muy diferente a los demás, este sitio alfarero no vende el barro pintado, lo vende al natural. Agradezco las atenciones de Gustavo Ramírez y el Sr. Alfonso Ramírez (trabajadores y familia) por las atenciones que me dieron para conocer más a fondo esta hermosa tradición artesanal y su problemática. El día en este taller comienza temprano, lo primero que se hace es ir por la materia prima, el barro, pero esta tierra no es cualquier tierra, existen 3 tipos de Barro, el blanco, rojo y negro, cada uno con una elasticidad, endurecimiento y una resistencia diferente. El barro debe de crear una pieza maciza. Una vez que se extrae el barro del banco cercano se procede a ser secado, se tiende en un espacio donde el sol haga el trabajo; cuando se ha secado se comienza a moler para obtener una consistencia fina y sin grumos. Este proceso se realiza al aire libre, por lo cuál el calor es un factor de fatiga para las personas que realizan esta tarea. Una vez que se ha cernido en una criba se comienza a hacer la "mezcla", y se da inicio al proceso de amasado, el cuál requiere mucha destreza y de fuerza física, ya que el no realizarlo con cuidado puede afectar la calidad de la pieza en donde se utilice este bello material.
Una vez que se obtiene la consistencia adecuada se lleva a una de las mesas de trabajo donde es moldeado para que sea introducido al molde, y ahí se le dan los detalles para que el diseño se vea lo mejor posible. Los moldes que usan van desde la olla con orejas tradicional, la copa, la tipo piedra, la de flores, la italiana y algunas otras donde el diseño se realiza de forma manual. El Sr. Alfonso y su familia han logrado avanzar de una técnica básica hasta una especializada, sin dejar de lado lo tradicional y artesanal; innovando y además participando con sus creaciones en competencias artesanales para así poder dar a conocer en más lugares estas bellas piezas tradicionales. Después de que se deja secar el barro un momento en el molde y este adquiere la consistencia deseada se realiza el alisado de la pieza para eliminar imperfecciones y que la forma sea la adecuada. Una vez que se ha limpiado se procede a sacar la pieza para que seque al sol y pueda estar lista para ser introducida al horno.
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